DESCANSE CIENTÍFICAMENTE RELAJANDO SUS MÚSCULOS

Método Curativo Sin Drogas Ni Operaciones

DESCANSE CIENTÍFICAMENTE RELAJANDO SUS MÚSCULOS

La relajación es el descanso entre dos periodos de actividad cuya consecuencia es que al reanudar el trabajo se hace con mayor facilidad y acierto. Establece una ecua­ción entre su esfuerzo y su trabajo, de que resulta la efi­cacia, sin desperdicio de energía para cumplir con pro­vecho sus diarias labores, ya sean de índole mental o física.

No es posible la rápida y eficiente acción, donde falta la habilidad de relajar músculos y nervios. Quienes sé apre­suran, inquietan, desazonan, irritan, contorsionan y agitan no son los que mejor trabajan, pues se desgastan y fatigan antes de que llegue la hora de la acción.

Tiéndase a lo largo boca arriba, dejando flojos todos los músculos y después se distribuye el pensamiento por todo el cuerpo de cabeza a pies. En esta postura, se hacen unas cuantas respiraciones profundas. Se puede variar este ejercicio volviéndose completamente de un lado y relajando enseguida todo el cuerpo. Después se vuelve del otro lado y se relaja igualmente. Durante el relajamiento conviene formar la imagen mental de que se está tendido en mullido lecho y que el cuerpo es como plomo, dejando caer los bra­zos pesadamente a uno y otro lado del cuerpo. Una vez dominados los brazos se ejercitan las piernas, primero una, luego otra y al fin entrambas de modo que caigan ten­didas por su propio peso y queden completamente rela­jadas. Después se levanta la cabeza, y se deja caer de la misma manera. Hecho esto, se forja la imagen mental de que el cuerpo descansa en la cama por su propio peso.

La duración de estos ejercicios, depende del tiempo disponible para el cumplimiento de sus labores; pero si usted desea mayor rendimiento en su trabajo físico o mental, practique la relajación de cinco a quince minutos y una sensación de plenitud y el restablecimiento de su potencia vital será la halagadora respuesta.

Si quiere mayor rendimiento en su trabajo, relájese diariamente cuantas veces le sea posible.

Profesor Narváez.

Propiedad Intelectual de Conrado Narváez Zuluaga. 1965 Colombia.

• info: jairo.narvaez@yahoo.es

RESPIRE CIENTIFICAMENTE

Método curativo sin drogas ni operaciones

Registro No. 249 – Libro. Tomo 8.

De obras Científicas del Ministerio de GobiernoBogotá Colombia
Propiedad Intelectual de Conrado Narváez Zuluaga

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RESPIRE CIENTÍFICAMENTE

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El aire u oxigeno, primero y vital elemento para la vida, no ocupa en nuestra mente el puesto preferencial que su importancia merece. La civilización con sus múltiples halagos, va anestesiando nuestros sentidos y aletargando nuestro entendimiento, hasta disminuir el poder instintivo y el uso correcto de la razón natural.

Saque usted de la respiración el máximo aprovecha­miento de tan vital elemento, siguiendo la sencilla técnica que a continuación le indico.

De pie o sentado en cómoda posición, recta la columna vertebral, la cabeza levantada y mirando el oriente, con el pecho erguido y los hombros un poco hacia atrás, arroje fuertemente de sus pulmones el aire retenido, e inhale lentamente contando mentalmente de uno a seis (1-2-3-4-5-6), al llegar a seis suspenda la inhalación y retenga lo inhalado tres puntos o sea(1-2-3), luego exhale lenta­mente contando mentalmente de uno a seis (1-2-3-4-5-6), y descanse tres puntos (1-2-3). O sean seis puntos inha­lando, tres reteniendo, seis exhalando y tres descansando.

Practique estos ejercicios de cinco a diez minutos tres veces al día, pero si lo recuerda, y puede hacerlo seis veces o más, mejor para Ud. También pueden practicarse en el lecho.

Cuando Ud. logre hacer estos ejercicios sin cansancio, aumente los puntos inhalando, reteniendo, exhalando y descansando en la forma siguiente: inhalando ocho, rete­niendo cuatro, exhalando ocho, descansando cuatro.

Más tarde inhale diez, retenga cinco, exhale diez y des­canse chico y así sucesivamente va aumentando el número sin fatigarse hasta que logre dar a sus pulmones la elas­ticidad suficiente para recibir y aprovechar en la vitalización de su estructura todo el oxígeno que su organismo necesita.

Procure no hacer esfuerzos superiores a su capacidad tratando de forzar sus pulmones, pues el lento ejercicio los irá ensanchando en forma natural hasta que logre el equilibrio funcional. Respire siempre por la nariz, no por la boca. Procure vencer la mala costumbre de respirar por la boca.

Practique estos ejercicios tres o más veces al día. Cinco a diez minutos cada vez.

Profesor Narváez.

Propiedad Intelectual de Conrado Narváez Zuluaga. 1965 Colombia

• info@superacionfisicamental.com